De la misma forma que un pintor o dibujante puede crear algo de la nada, imaginemos una Inteligencia Artificial que pueda crear imágenes fotográficas a pedido.

En ese sentido se está probando, como ya vimos, con la creación automática de rostros que no existen a partir de millones de fotos que entrenaron a estos sistemas. EL resultado no es un collage de partes de dichas fotos, sino que el sistema conceptualiza los rostros y sus partes para crear nuevas versiones.

Un solo modelo con varias versiones

Avancemos un poco y pensemos que se puede hacer una sesión fotográfica para una marca de indumentaria con una modelo de piel blanca y cabello castaño. Como esta marca tiene alcance mundial debe cambiar de modelo para adaptarse a los genotipos de cada país. Esta marca podría pedirle al sistema que sustituya los rasgos del rostro, el pelo, el color de piel, etc… para adaptarse a cada región.  Rosebud AI

Inteligencia Artificial reconociendo los principales rasgos del rostro original y emplazándolos por otro.

Podemos pensar que no sería necesario que quien posa en primera instancia tenga las cualidades físicas de una modelo. Simplemente con alguien que pose en primera instancia permitirá luego aplicar un nuevo rostro con distintos gestos en base a la pose fotografiada.

En la industria del cine, se va a poder revivir a actores ya fallecidos y permitirá actuar en una misma escena o película a actores o personalidades de la historia. Quizás nosotros mismos podamos optar por ver películas con nuestro rostro en la del protagonista (buscar la app Zao de china).

https://twitter.com/i/status/1168049059413643265

Fotografía al infinito y más…

Pero todavía vayamos un poco más allá y pensemos que un día no muy lejano vamos a poder pedirle a estos sistemas que creen una imagen completa de la nada.

Por ejemplo de una mujer de rasgos orientales, de pelo corto, con aros y  blusa amarilla, mirando a cámara y ubicada en un espacio interior multicolor. La IA va a poder generar esta imagen única, basada en los millones de ejemplos con los que fue entrenada.

Y si cambiamos el rostro por uno latino?

Y no habrá que pagarle a ningún modelo o derechos de autor a ningún fotógrafo porque nada existe realmente.

Asistentes

En la empresa Google se está trabajando en determinar, mediante estas inteligencias artificiales, cuales fotos son más aceptadas o bellas para el público.

De esta manera en pocos años nuestros teléfonos podrán decidir cuál de una serie de selfies que nos hicimos es la mejor y descartar el resto. También podrán sugerir ajustes para que se adapte mejor estéticamente o hacernos comentarios sobre la misma para indicarnos posibles cambios en la toma.

Conclusiones

Esto que hasta hace unos pocos años parecía imposible ya se está probando y el crecimiento de estos sistemas es tan acelerado que modificarán la forma en que vemos el mundo.
Recordemos que cuando salieron las cámaras digitales, muchos se negaban al cambio argumentando que nunca alcanzarían la calidad de la foto analógica.