El grupo está retomando las salidas fotográficas y aprovechamos el fin de semana para recorrer algunos pueblos de Buenos Aires que se encuentran a unos 100 kilómetros.
Texto: Marcela Margarit
El sol del 19 de febrero de 2022 nos encontró ruteando en una caravana de varios vehículos hacia la localidad de San Andrés de Giles.
Carlos Keen
Nuestra primer parada fue Carlos Keen. Ahí nos esperaba la vieja estación de tren, pintoresca en su arquitectura campestre y con huellas que invitaban a la mirada fotográfica.
En el campito: el molino, los árboles, el camión hidrante y algunas herramientas rurales. A la vera de la plaza central, pudimos conocer la casa abandonada, algún viejo almacén -hoy espacio gastronómico- y la pintoresca Iglesia del pueblo. También llegamos a retratar varias sonrisas de feriantes y ciclistas, que cada fin de semana se acercan a este bello pueblo.
Villa Ruiz
Poco después, llegamos a Villa Ruiz. Nos recibió el sol iluminando a pleno la estación ferroviaria, con su cartel reglamentario y los perros lugareños que se echaban confiados a nuestra mirada. Unos pasos más allá, varias esquinas con sus típicas construcciones ochavadas hechas de ladrillo y puertas añejas, enmarcadas por una arboleda frondosa y pastos prolijos. Alguna de ellas, envueltas en enredaderas y seguramente historias de vida.
Entre ellas, la de Doña Teresa, una adorable costurera de 84 años que nos regaló anécdotas y su pícara mirada, que pudimos llevarnos en las fotos que tomamos. También se sumó al momento del retrato el cura del pueblo, párroco de la capilla Nuestra Señora de la Asunción, una pequeña construcción ubicada frente a la plaza.
Cucullú
Unos 10 kilómetros más allá, la estación de tren de Cucullú, parada obligada en camino a los hornos ladrilleros del pueblo. Nos recibieron las familias obreras, que con gusto posaron para nuestras fotos, y nos dejaron recorrer el lugar, pudiendo conocer como se elaboran los ladrillos, los moldes que se utilizan, los tratamientos de secado al sol. Infaltables los tractores y sus enormes ruedas.
Azcuénaga
Al pasar raudamente por S. A. de Giles se sumó Claudia Martino (que vive ahí y nos acompañó contándonos muchos detalles interesantes), y nos dirigimos al Club Recreativo Apolo, en el pueblo de Azcuénaga. Momento de risas y anécdotas para el grupo. Repuestas las energías, enfilamos para la estación de tren, la más grande de todo el recorrido; con su gran parque y sus vías interrumpidas por el cañaveral.
A pocas cuadras, y encontrándonos con casonas centenarias y otras de arquitectura más moderna, llegamos a la capilla Nuestra Sra. del Rosario ubicada frente una plaza central; espacio que contaba con una bella parquización.
San Andrés de Giles
El atardecer anunciaba su llegada por lo que nos apuramos a ir al cementerio sud de San Andrés de Giles. Un cementerio abandonado, cuyas ruinas, huellas y detalles nos permitieron hacer buenos registros fotográficos.
La noche nos encontró ya en camino de tierra, levantando polvareda para terminar la jornada en el Bar 2 de Mayo en el pueblo de S. A. de Giles. Bar tradicional de equina, al estilo de las antiguas pulperías, lleno de recuerdos fotográficos y objetos de todo tipo cubriendo sus paredes y colgados del techo. La risa, la bebida, y los últimos flashes de las cámaras cerraron la noche, augurando muchas salidas más.
Texto: Marcela Margarit
Gracias a todo el grupo, la pasamos genial y pronto se vendrán nuevas salidas fotográficas.
Algunas fotos más
1 Comments
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Muy lindas fotos, salida y nota, recién las veo !!!